Descubrir que su compañero felino necesita una extirpación de pólipos en la oreja puede ser una experiencia estresante para cualquier dueño de mascota. Los pólipos en la oreja de los felinos, si bien son crecimientos benignos, pueden causar molestias y problemas de salud importantes si no se tratan. Esta guía completa proporciona información detallada sobre qué esperar antes de que su gato se someta a una cirugía para la extirpación de pólipos en la oreja, lo que lo ayudará a prepararse y comprender el proceso.
Comprender los pólipos en las orejas de los gatos
Los pólipos en las orejas, también conocidos como pólipos nasofaríngeos, son crecimientos no cancerosos que se producen comúnmente en las orejas de los gatos, especialmente en los más jóvenes. Estos pólipos se originan en el revestimiento del oído medio, la trompa de Eustaquio o la nasofaringe (la zona detrás de la nariz). Aunque se desconoce la causa exacta, a menudo se sospecha que se trata de una inflamación crónica o infecciones virales.
Reconocer los signos de los pólipos en el oído es fundamental para una intervención temprana. Los síntomas más comunes incluyen:
Sacudir o inclinar la cabeza
Secreción del oído (a menudo con mal olor)
Manoseando la oreja
Disminución de la audición o sordera
Signos de las vías respiratorias superiores (estornudos, secreción nasal) si el pólipo se extiende a la nasofaringe.
Si observa alguno de estos síntomas, es importante consultar rápidamente con su veterinario para que le realice un examen y diagnóstico exhaustivo.
Diagnóstico de los pólipos en el oído
El diagnóstico de pólipos en el oído generalmente implica una combinación de examen físico, examen otoscópico y técnicas de diagnóstico por imágenes. El veterinario comenzará examinando las orejas de su gato con un otoscopio, una herramienta que permite visualizar el canal auditivo y el tímpano. Esto a menudo puede revelar la presencia de un pólipo.
Otras pruebas diagnósticas pueden incluir:
Citología: Se puede recolectar una muestra de secreción del oído y examinarla bajo un microscopio para descartar una infección.
Radiografía (rayos X): Las radiografías pueden ayudar a evaluar la extensión del pólipo e identificar cualquier cambio óseo en el oído medio.
Tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética (RM): estas técnicas de imágenes avanzadas proporcionan imágenes detalladas del oído y las estructuras circundantes, lo que permite la localización y evaluación precisa del pólipo.
Rinoscopia: si se sospecha de pólipos nasofaríngeos, se puede realizar una rinoscopia (examen de los conductos nasales con un endoscopio).
Un diagnóstico definitivo es crucial para determinar el mejor tratamiento para su gato.
Preparación para la cirugía de extirpación de pólipos en las orejas
Una vez que el veterinario haya diagnosticado un pólipo en el oído y haya recomendado la extirpación quirúrgica, es importante saber qué esperar antes del procedimiento. Una preparación adecuada puede ayudar a garantizar una cirugía sin problemas y exitosa.
Consulta prequirúrgica
Antes de la cirugía, su veterinario realizará una consulta prequirúrgica exhaustiva. Esto generalmente implica:
Revisar el historial médico de su gato y sus medicamentos actuales.
Realizar un examen físico para evaluar la salud general de su gato.
Discutir el procedimiento quirúrgico, los riesgos potenciales y los resultados esperados.
Responder cualquier pregunta o inquietud que pueda tener sobre la cirugía.
Análisis de sangre preanestésico
Para garantizar que su gato esté lo suficientemente sano para la anestesia, generalmente se requiere un análisis de sangre previo a la anestesia. Este análisis de sangre ayuda a evaluar el funcionamiento de los riñones, el hígado y otros órganos vitales de su gato. También ayuda a identificar cualquier problema de salud subyacente que pueda aumentar el riesgo de complicaciones durante la cirugía.
Ayuno
Es probable que su veterinario le indique que no le dé de comer a su gato durante un período determinado antes de la cirugía, normalmente de 8 a 12 horas. Esto es para reducir el riesgo de vómitos y aspiración durante la anestesia. Por lo general, se permite beber agua hasta la mañana de la cirugía, pero es importante seguir las instrucciones específicas de su veterinario.
Medicamentos
Informe a su veterinario sobre todos los medicamentos que su gato esté tomando actualmente, incluidos los medicamentos recetados, los medicamentos de venta libre y los suplementos. Es posible que sea necesario suspender algunos medicamentos antes de la cirugía para evitar interacciones con la anestesia o aumentar el riesgo de sangrado.
Preparación en casa
Prepare un espacio cómodo y tranquilo para que su gato se recupere después de la cirugía. Debe ser un área cálida y sin corrientes de aire donde su gato pueda descansar sin ser molestado. Asegúrese de que su gato tenga acceso a agua fresca y a una caja de arena limpia.
Procedimiento de extirpación de pólipos en la oreja
La técnica quirúrgica utilizada para la extirpación de pólipos en el oído depende de la ubicación y el tamaño del pólipo. Los abordajes quirúrgicos más comunes incluyen:
Tracción-avulsión: consiste en sujetar el pólipo con unas pinzas y extraerlo con cuidado. Si bien es un procedimiento sencillo, presenta un mayor riesgo de recurrencia porque es posible que no se elimine todo el pólipo.
Osteotomía de la bulla ventral (VBO): este procedimiento más invasivo implica abrir quirúrgicamente la bulla (la cavidad ósea que alberga el oído medio) para extirpar el pólipo y cualquier tejido inflamado. La VBO generalmente se recomienda para los pólipos que se originan en el oído medio y tiene un menor riesgo de recurrencia.
Extirpación endoscópica: en algunos casos, los pólipos se pueden extirpar utilizando un endoscopio, un tubo delgado y flexible con una cámara e instrumentos quirúrgicos. Este método mínimamente invasivo se puede utilizar para los pólipos ubicados en la nasofaringe o el conducto auditivo externo.
Durante el procedimiento, su gato estará bajo anestesia general. El cirujano extraerá el pólipo con cuidado, minimizando el traumatismo en los tejidos circundantes. Según el abordaje quirúrgico, se puede tapar el canal auditivo con gasa para controlar el sangrado. Se le administrarán analgésicos para que su gato se sienta cómodo durante la recuperación.
Posibles riesgos y complicaciones
Si bien la cirugía de extirpación de pólipos en el oído generalmente es segura, existen posibles riesgos y complicaciones que se deben tener en cuenta:
Complicaciones relacionadas con la anestesia: Como con cualquier procedimiento quirúrgico que implica anestesia, existe el riesgo de reacciones adversas o complicaciones.
Sangrado: El sangrado puede ocurrir durante o después de la cirugía.
Infección: Puede producirse una infección en el sitio quirúrgico.
Recurrencia: Los pólipos auriculares pueden reaparecer incluso después de su extirpación quirúrgica.
Síndrome de Horner: es una afección neurológica que puede provocar caída del párpado, constricción de la pupila y protrusión del tercer párpado. Puede producirse si los nervios que controlan estas funciones se dañan durante la cirugía.
Parálisis del nervio facial: el daño al nervio facial puede causar parálisis de los músculos de un lado de la cara.
Pérdida de audición: En algunos casos, la cirugía puede provocar pérdida de audición.
Su veterinario discutirá estos riesgos con usted en detalle antes de la cirugía y tomará medidas para minimizar la probabilidad de complicaciones.
Preguntas frecuentes (FAQ)